La Purga: la noche de las bestias
Título original: The Purge
País: EEUU
Director: Janes DeMonaco
Año: 2013
Fui a ver esta película con una mezcla
de entusiasmo y desconfianza: no sé por qué nunca las buenas ideas van
acompañadas de un desarrollo adecuado. Por suerte, el trasfondo de la historia
y sus paralelismos con la vida real te hacen pensar hasta olvidar los defectos
de forma.
LA TRAMA
Estamos en EEUU en el año 2022. Los
índices de criminalidad son los más bajos de la historia del país. Las personas
son amables, comprensivas y siempre están abiertas al diálogo. El precio a
pagar por esta paz: una noche al año se despenalizan todos los delitos,
incluidos los de sangre.
Una familia adinerada se prepara para
escoltarse tras los muros de seguridad de su casa durante la noche de la purga,
pero esta noche algo va a salir mal. A media noche, un hombre de un barrio
pobre llega a su puerta pidiendo auxilio, y el pequeño de la familia no puede
resistir la tentación de prestarle ayuda y dejarlo entrar.
Con un extraño en su casa y un grupo
de asesinos en la puerta exigiendo su derecho a la purga, esta familia pasará
la noche más larga de su vida, a la que sólo pueden pedirle salir con vida.
EL ANÁLISIS
Como ya me pasó con otros films
futuristas como Daybreakers, la verdad es que la película la veo un poco falta
de chicha. Un comienzo lento, recreándose en la historia de fondo de la que
parte la trama, pero de forma un poco repetitiva. Para los que hemos visto el
tráiler, la primera hora de película es totalmente innecesaria (qué manía con
contarnos todo salvo el final en los tráilers de hoy), y para los que vayan sin
saber de qué va sobran cuarenta minutos. Creo que igual de malo es tener una
explosión en el minuto uno al más puro estilo Michael Bay, como situar al
espectador tan lentamente. Ni siquiera muestras detalles interesantes o
curiosos durante esos minutos.
Una vez que la trama por fin arranca,
igual de rápido que sube vuelve a decaer, y llegamos a un final insulso, si
bien lleno de significado, falto de la chispa propia y necesaria en este arte.
El mensaje que transmite, y la reflexión a la que invita no es moco de pavo,
pero los fallos de la narración hacen que pierda muchísima fuerza.
LA CRÍTICA
La verdad es que esperaba mucho más de
esta película, no lo voy a negar. También es verdad que sí hace un par de
conexiones con los EEUU real, que te da para una larga conversación con tus
amigos después de la película (true story). Un país donde se legaliza la
violencia como parte de una campaña política cuyo trasfondo oculto es la
movilización de un capital de dinero importante, que acaba en los bolsillos de
los mismos promotores. Dicho en pocas palabras: el meter miedo a la población
para poder venderles seguridad. Y como único "daño coleteral" la
desaparición de un sector de la población no activo que requiere un esfuerzo
económico para la reintegración social.
La purga se puede comparar con
la venta legal de armas, con el negocio de la salud, la privatización de
la educación... Lo mires por donde lo mires hay una clase media favorecida que
tarde o temprano debe abrir los ojos ante la gran mentira que están viviendo.
En la película no se meten tanto en el tema, y prefieren dejar al margen a las
verdaderas clases privilegiadas: los que realmente se enriquecen con este
negocio, y que son intocables hasta el día de la purga.
Esta historia es una metáfora clara de
todas estas situaciones. el protagonista es un hombre cuya fortuna ha crecido
gracias a que se dedica a vender sistemas de seguridad para el día de la purga.
Este mismo sistema demuestra ser inútil cuando la violencia de este día
realmente llama a su puerta, en lugar de azotar a la población desfavorecida
que no puede ocultarse tras un muro. Todo esto se vuelve más rocambolesco y más
simbólico aún cuando analizamos a los asesinos que acechan al rico empresario:
jóvenes de clase media alimentados en los ideales sobre los que se justifica su
enorme fortuna.
(El siguiente párrafo contiene
SPOILERS)
Lo que realmente hace que el final de
esta cinta sea tan insulso y tan incompleto, es que nos quiere vender un ideal
vacío y un puñado de buenas intenciones: pero no nos da una solución. Cuando
parece que todo se ha solucionado totalmente, la familia se enfrenta de nuevo a
los hijos de la purga: esta vez sus propios vecinos llenos de envidia, que
deciden entregarse a sus instintos primarios. El director impone la cordura y
para la matanza de lleno: un grito silencioso que pide la no violencia con no
violencia. El problema es que sin un razonamiento, o sin un gesto que refuerce
esos ideales, son sólo palabras. Llega el día, el indigente es abandonado a su
suerte de nuevo, y la familia no pondrá flores moradas en su puerta en la
siguiente purga. Salen de su madriguera con el rabo entre las piernas, sólo
para esconderse en una nueva madriguera: la del silencio.
LO MEJOR
La historia de fondo del por qué de la
purga y su funcionamiento es escalofriante, y es lo único que hace que el lento
inicio se haga un poco más ameno. Además, el tema tiene tantas interpretaciones
fuera del cine que de seguro provoca discusiones al salir de la sala.
LO PEOR
El personaje femenino (que yo conocía
como Cersei Lannister) es completamente inútil. Se pasa todo el rato de un lado
para otro gritando y asustándose, sin oponerse a ni un solo atacante. Entiendo
que hayan querido usarla como el símbolo de la no violencia, pero sus dos hijos
están en grave peligro, ¿qué hay del instinto maternal?
EN RESUMEN
Como suele pasar con estas historias:
mucho potencial, un gran argumento y una moraleja que se viene a menos por el
descuido de los personajes y del ritmo de la trama. Desde el punto de vista
narrativo es más que interesante, pero desde el cinematográfico bastante
insuficiente.
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